Cuban Canadian Foundation / Protestas

Cuando Carmen Delia Llano Ochoa comenzó la lucha por la liberación de su hijo de 9 años Alejandro Merchán, imponiendo su dignidad por encima del burdo chantaje a que fue sometida por las autoridades del Consulado Cubano en Montreal, quizás no imaginó una tan rápida victoria.

El monstruo represivo que ha creado el régimen castrista contra el pueblo y el exilio cubano, fue esta vez derrotado frente al empuje de un grupo de familiares y amigos que junto a Carmen Delia se lanzaron a la protesta con pancartas, tambores y gritos que pedían día a día, hasta la saciedad, la libertad del niño secuestrado en Cuba. La cónsul en persona le dijo a Carmen que "a su hijo no se lo entregarían a menos que se inscribiera y colaborara con ellos y que si quería que se quejara a la Fundación Cubano Canadiense o a quien ella quisiera." Y Carmen y la Fundación se unieron convencidos de que más temprano que tarde el tirano tendría que ceder y morder el polvo de la derrota.

Alejandro Merchán ya hacía meses que tenía otorgada la Visa de Residencia para viajar a Canada y reunirse con su madre, pero en Cuba hay que pedirle permiso a Fidel Castro para salir al exterior, acto totalmente violatorio del articulo 13 de la Declaracion Universal de los Derechos Humanos, porque "toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país."

El niño Alejandro fue utilizado como rehen para doblegar la voluntad de su madre de querer seguir luchando en el exilio por la libertad de los cubanos que quedaron atrás en la prisión más grande del mundo que es Cuba. Pero Carmen dijo no al chantaje, dijo no a un régimen que quiso doblegarla y ponerla a colaborar con ellos a cambio de liberarle a su hijo. Y el monstruo represivo tuvo que ceder frente a la justa campaña desatada.

Agradecemos a la prensa en general, y en especial a los periódicos El Popular de la comunidad hispano canadiense y The Gazetta de Montreal por la amplia cobertura del caso. Agradecemos también a las organizaciones no gubernamentales que dentro y fuera de Cuba nos apoyaron y sobre todo al gobierno canadiense por haber tomado rápidamente cartas en el asunto.

Cuando hacíamos un recuento en un reciente artículo de las actividades realizadas en la campaña, decíamos de llevar este caso y otros similares casos de niños secuestrados en Cuba, a las Consultaciones de Derechos Humanos a Celebrarse en Ottawa en Febrero próximo, para que se compruebe con éste y muchos otros ejemplos la clase de régimen con quien algunos ilusos intentan aún negociar o establecer "relaciones constructivas." De todos modos presentaremos el caso, pero como un caso ganado y cerrado para que no se repita.

Podemos decir que fue una rápida victoria de apenas dos meses de campaña si la comparamos con otros casos similares. Ya habíamos iniciado una nueva etapa donde familiares del niño y los grupos de derechos humanos en Cuba, así como la prensa internacional acreditada en Cuba, jugarían su papel. La CNN había hecho los contactos para realizar su cobertura después de haber realizado con inteligencia un nuevo reportaje sobre el niño Elian González y la cantaleta del tirano por devolverlo a Cuba después que su madre murió ahogada tratando de llevarlo a tierras de libertad. La comparación se imponía, era evidente. Sin dudas el tirano comprendió que mientras más tardara en la liberación del niño Alejandro sería mucho peor y al final de todos modos tendría que ceder, porque se haría cada vez más evidente su cinismo y su flagrante violación.

Esto es una muestra más que nos reafirma que ése es el camino, porque como dijo nuestro Jose Martí, "el déspota cede a quien se le enfrenta, no a quien se le humilla, con su única manera de ceder que es desaparecer. A los que le desafían respeta, nunca a sus cómplices."

El niño Alejando Merchán finalmente arribó al aeropuerto de Montreal el pasado viernes 12 de Diciembre junto con su padre adoptivo. Sí. Triunfó la dignidad por encima del chantaje y el niño ya se encuentra entre nosotros, sano y salvo, como exigió su madre, como exigimos todos los que la apoyamos; porque cuando una causa es justa merece la victoria. Sí. La libertad de esta nación libre también será para ti Alejandro Merchán.

Campaña de CCF